GITANO

Hoy me he quedado muerto. ¡Habráse visto Gitano más gitano que mi gitano!... ¡No puede haber un elemento más gitano!
Mira que lo pensé: ¡Ten cuidado, Ángel! Que este Gitano es muy gitano.

Y es que con este Gitano hay que tener mucho cuidado. Porque, a pesar de ser tan zalamero, lleva en su sangre, sangre gitana.

No es que el otro gitano sea menos gitano... Que es igual o más... -todavía recuerdo una caja de porcelana que me vendió que juraba y perjuraba por todos los santitos del cielo que provenía de la Francia más refinada y que a los cuatro días de adquirirla localicé como vendida en una Famosa Sala de subastas española... supongo que fue allí donde el Gitano menos gitano compró la caja para luego vendérmela a mí a unos euros más cara... que tendrá que tener su ganancia, el Gitano menos gitano... O sea, que de Francia nada!-; pero es que mi Gitano Preferido, al cual yo veneraba por ese alarde pomposo, simpático y zalamero, hoy ha intentado colármela por todos los flancos. Vamos! Que yo mismo me he sentido muy humillado por mi Gran Gitano...

-Pero Juan... ¿cómo me haces ésto a mí? Pero, ¿de dónde te piensas que yo he salido?... Pero ¿tú has tenido un cliente que te haya determinado con tanta precisión el estilo, época y año de cada una de tus antigüedades? Venga! ¡no me seas tan Gitano!

-¡Que no! ¡que no, hermano!. Mira! ¿peo como yo te voy a enganá? ¡que no! ¡que tú pa mí eres mi hermano! ¡que yo de tí me fio de tó! ¡que ya sabes que yo a tí taprecio como un hermano má! ¡y que si tú necesita algo, Juan está aquí pa darte to!

-Pero Juan... ¿cómo tú te piensas que yo voy a tragarme que ese cuadro es original y me lo quieres vender por 500 euros?

-¡A vé, hermano! ¡qués un cuadro mu bonito! ¿no ves cómo está pintá la Virgen con el niño! ¡qués mu bonito! ¡que yo por ser tú, 400 euros! ¡que no te vaya a pensá que yo lo vendo a cualquiera por ese precio! ¡que no, hermano, que no! ¡quel cuadro, fíjate, es patí por 300 euro! Pa que veas lo que yo taprecio a tí!

-Vamos a ver Juan... ¿cómo pretendes meterme esa falsificación por 300 euros? Pero... ¿cómo me vas a colar que ese cuadro es original? Sí, sí! el marco es bonito y está muy bien reproducido... pero... ¿cómo pretendes que yo me crea que esa pintura es de época?

-¡Por mi muertos, hermano! quel cuadro es bueno y bonito! ¿no vé la cara de la Virgen, tan guapa? ¡Pero si lo compré a un marqué! Que ya sabe usté... los marqué como viven por tó lo alto... pos tié que vendé to cuando se les acaba el dinero! ¡y te juro que yo casi no gano ná vendiéndotelo a tí! Pa que veas! que yo por 200 euros te llevas el cuadro. Que tea gustau... que lo veo en tu cara que tea gustau el cuadro.

-Yo pensaba que eras más serio, Juan... después de comprarte lo que ya sabes que te he comprado y después de traerte los clientes que te he traido... ¿cómo haces ésto?

-Que no, hermano... que no... que el cuadro por 100 euros es pa tí... Que te lo digo yo ques mu bonito... que sí!

-Ya! bonito si es... pero falso como Judas... más que tú en este momento.

-¡Ay payo! ¡no me diga eso! ¡que mi padre era el tio cebollo y era mu honrao! ¡que ya ves si te quiero que el cuadro por 50 euros es pa tí!... pa que luego no digas! que yo mehe disgustau mucho... ¡ay payo! ¡por tos mis muertos que yo no te quiero engañá! ¡ay que disgusto me da usté! ¡con lo que yo lo aprecio a usté y a toa su familia, que aunque no la conosca, el gitano Juan la apresia mucho! ¡ay qué disgusto! ¡ay quea rrepentio estoy! ¡mia ques usté listo! ¡ay por mi muertos que yo no le querio engañá a usté, que me muera aquí mismo!

Pues eso... Hoy he descubierto, que no te puedes fiar de nadie, ni del Gitano Juan.