jueves, 30 de octubre de 2008

Thiago

Pues eso.

Yo no puedo permitir que Thiago (http://elblogquethiago.blogspot.com/ ) se lo crea tanto por muy "Mentor Meus" que sea. Y he decidido mostrarles mis "All Stars" -como las llama él en su estupendo blog-. Son más bonitas que las de Thiago -¡dónde va a parar!- ya que su color amarillo da mucho más estabilidad a mis lindos pies.

Las compré en un gran centro comercial y mis buenos euros que me costaron. Mi pareja se puso a morir cuando vio que adquiría semejante producto. Él, que es muy reticente a estos colores tan chillones, no soporta vérmelas colocadas en mis extremidades. Pero yo, chico colorido total y amante del amarillo -todavía conservo mi estupendo paraguas de dicho color adquirido en Valença do Miño- me lancé a por ellas desesperadamente cuando las vi en aquella gran estantería.

¡Thiago! No te lo creas tanto... que los demás también tenemos unas buenas "All Stars".

miércoles, 29 de octubre de 2008

Posiciones.

Mi atrevimiento me ha hecho, hoy, someter a una experiencia sociológica a mis compañeros de trabajo. Es curioso la diferencia que puede existir entre el varón y la hembra en cuestiones estéticas.
La estadística en cuestión ha consistido en imprimir la imagen de referencia y someterla al análisis de los machos y hembras de los sucesivos despachos. Es evidente que la imagen, además de un poco atrevida, es un tanto erótica. Yo les he dicho que era la foto de propaganda de una crema de "Baba de Caracol" -mentira la mía- y que, por lo tanto, no era para escandalizarse tanto. Que la estaban poniendo en televisión todos los días -otra mentira- y que dentro de nada la veríamos en los grandes paneles publicitarios de las autovías que dan entrada a la capital -otra mentira más-. Ante los alaridos del personal más estrecho de mi despacho, les he tenido que repetir que la baba de caracol tiene unos efectos rejuvenecedores sobre la piel y la salud corporal de las personas y que no entendía su escándalo ante una foto tan perfecta propagandísticamente hablando -y sobre todo, tan sabrosona para mí... que tanto me gusta el caracol en tomate como el árbol donde está prendido, éste último al natural! jajaj!-.

Bueno. Al grano.

Mi sorpresa ha sido que todos los varones del edificio han cogido y contemplado la foto por su posición normal: o sea, polla para abajo -tal cual manifiesta la primera foto-

Y todas las mujeres han puesto la foto en la siguiente posición para admirar su belleza:

No sé qué artefactos tendremos en nuestras cabezas, pero todo esto del cambio de posición a la hora de observar y contemplar tan linda foto me ha descuadrado totalmente. Y lo curioso es que el 100% de los hombres la han contemplado con la primera posición y el 100% de las mujeres con la segunda posición -en horizontal, pene para arriba y caracol para abajo-

Ahora... ¡vais y me decís que todo esto no es curioso!
Y yo... me quedo admirado de lo inteligente que era Freud. Increible.

Amalgama


No me he parado detenidamente a descifrar lo que dicen estos latinajos. La verdad es que cuando los descubrí me llamaron mucho la atención, porque dado el momento en el que tuve conciencia de su existencia, mis pensamientos eran otros más profanos a lo que supuestamente estas letras cuentan. El caso es que no me he detenido a traducir los textos puesto que debería, en primer lugar, ver dónde empiezan y dónde acaban unas palabras y comienzan las demás. Una tarea que me exigiría sentarme detenidamente y diccionario en mano, descubrir el misterio. Algún día, quizás. Supongo, por su mera visión, que pueden ser textos de San Pablo. Y como San Pablo siempre me fue muy desagradable, pues no he encontrado un momento de relajación para releer sus palabras.
El caso es que por esta puerta, flanqueada por las inscripciones, nos escapábamos del internado en las noches de lujuria y desenfreno -que fueron pocas-. Y claro, supongo que esas letras nos dirían: ¡Vais a ir al infierno!.
Pues llevaban razón. La vida, en muchas ocasiones es un infierno. Un infierno diario al que hay que hacer frente con unas buenas mangueras.
Hoy, después de tantos años, me he acordado de estos textos. Infinidad de personas que los leyeron ya no están. No están muchos seres queridos que las vieron. No está aquella niñez tan entrañable y aquella adolescencia retorcida. Sigo yo, y estoy convencido de que ellas seguirán más allá de mi presencia.
Hace unos días leía un texto -un soneto- en el que describiendo la fragilidad humana, el autor se asombraba de cómo una obra del hombre puede durar más que el hombre mismo. Al igual que estas letras.
¡Malditas Letras!

martes, 28 de octubre de 2008

ADRIAN

Hoy me he encontrado con el antiguo guardia de seguridad de mi trabajo. Sigue tan guapo como siempre. Y cuando me ha saludado con un efusivo apretón de manos, me ha lanzado una de sus maravillosas sonrisas. Eso unido a su cuerpo escultural y su actual estado físico -mucho más delgado-, me ha descolocado la tarde.

-¿Qué tal estás?

-Bien. Le he dicho ("¡tu sí que sigues bien!" he pensado)

-Al final, ¿te quedas o te trasladan?.

-Me trasladan; he tenido suerte. ("Pena que también te trasladaran a tí", he pensado)

-Pues me alegro por tí.

-Gracias, Adrián ("¡lo siento por no volver a verte allá donde me encuentre!", he pensado)

-¡Pues nada!, Pásate por el gimnasio antes de irte y te despides. A ver si tomamos algo juntos.

-¡Vale, Adrián! Me pasaré. ("Ya quisiera yo pasarme, pero por las duchas de tu gimnasio cuando has acabado de hacer tus deportes", he pensado yo)

¡Y yo me pregunto!... ¿por qué sigue habiendo cosas que uno puede pensar y no puede decir?

lunes, 27 de octubre de 2008

Motes


Lo mío con los Motes es imposible. Nunca puedo entenderme. Por eso, cuando voy al pueblo, acabo deprimido ante la imposibilidad de seguir una conversación vecinal. Es francamente imposible entender a los paisanos en sus conversaciones en las que constantemente se hace mención a otras personas por sus motes.
-Pos ha dicho "La Chuta" que el otro día se encontró con "La Villarejeña" y le dijo que en la casa de "La del Puti" tenían un problema mu gordo. -Decía la Chata-
-Pos no! eso es mentira. Que me lo ha dicho a mi "Zoqueta". El otro día se encontró con "Ojosdemierda" y le dijo que "El Repugnoso" había llegado de esa casa y que no pasaba ná. -Decía Lilidra-
-Pos eso no es verdá, Lilidra! -respondía "la Chata". Has de saber que "La Pimporra" vió el otro día a "La piejodura" y le dijo que "Patachicle" lo había visto tó... y bien claro te lo puede decir "El Botones"... Y si no, vas y le preguntas a "La Marota" y ya verás cómo te dice que "La Castelara" lo sabía y se lo dijo a "La pesacadera".
-Entonces, -dije yo inocentemente y muy asombrado- ¿quién tiene un puti en el pueblo?
-¡Mia que estás agilipollao! Si ya se lo digo yo a tu madre. Tu chico o se echa novia o no espabila... que será mu listo pa eso de estudiar, pero le falta un buen coño!... ¡Que no!... ¡que nadie ha puesto un puti!... ¡Que La del Puti es la Gregoria que vive debajo de "La Pitita" y enfrente de "La Moquita" pegando por detrás con "Malhuele"! ¿Tas esterao ya o qué?
-No sé, Chata!... ¿Malhuele? ¿quién es ese?
-¿Es que no conoces a "Malhuele"?. ¡Ay copón! ¡lo que yo digo! ¡que estás agilipollao! ¡Paices que no eres del pueblo! ¡paices de Poveda!... ¡Pos Malhuele es el que vive enfrente de "La Enroscá", que está casao con "La Rebolla", cuñao de "Chorizos" y vecino de la de "Torises". ¿Tas enterao ya o no?
-¿Chorizos?... ¿Chorizos... Vicente, querrás decir?
-¡Que no, copón! ¡que no! Que ese Vicente es "Vicente Bocanegra" y yo me refiero a "Chorizos" el de "Mangueras" que está casao con la chica de "La del Puti".
Y, como siempre... ¡todo acaba en un puti!. ¡Un verdadero putiferio de motes, diría yo!
-¡Ay copón! ¡no sé pa qué te digo ná! ¡Si no te enteras de ná!... ¡de ná! ¡Paices de Poveda! -gritaba "La Chata"-

jueves, 23 de octubre de 2008

Aguas Mayores/Menores


"Se prohibe hacer aguas mayores o menores en la plaza y sus galerias y echar cosa alguna que las ensucie bajo la correspondiente multa.
Son responsables de los niños, sus padres-
¿En la Villa de ... (ilegible)?"

Hablan David Guzmán (http://sdsanjurjo.blogspot.com/) y Thiago (http://elblogquethiago.blogspot.com/) de costumbres típicamente hispanas en sus blogs.
Hoy he descubierto en la plaza de esta localidad el panel medio borrado con oportuna advertencia.
Mantenido después de una restauración completa de la bella plaza, deja constancia de los hábitos nacionales allá por el año 1900.
Parece ser que era habitual -en la Plaza Mayor- encontrar residuos corporales humanos. Y el Alcalde de turno decidió acabar con susodicha costumbre.
Me llama la atención el final del bando. Parece ser que el Alcalde consagró de forma clara y contundente en esta localidad el principio del Código Civil español que establecía la Responsabilidad Civil Subsidiaria de los padres en relación a las conductas de sus hijos.

O sea... si su hijo se mea, su padre lo paga.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Paquito "El Chocolatero"










Uno de aquellos días tuve una confrontación muy seria con Paquito. Era normal. En el fondo no nos soportábamos y el mínimo comentario daba lugar a una discusión bastante fuerte.
He de decir, mea culpa, que soy persona de discusiones duras. Y que, a veces, me cuesta atemperar el genio cuando me quitan de forma tan contundente la razón.
Pero es que Paquito era el prototipo de "angelito mimoso", pequeñito y al cual sólo pude ver un testículo durante todo el tiempo que, por razón de estudios, viajes o trabajo, estuvimos juntos. Y he de reconocer que Paquito tenía los huevos bien gordos. Al menos, aquel que yo le vi salir por un lado del bañador: blanquito, suave -eso parecía- y bien contundente. A pesar de ser tan "enano", tenía unos buenos huevos!... ¡Ya le vale a Paquito no haberme enseñado más en tanto tiempo!...
Pues sí. Paquito los tenía -los huevos- bien gordos. E, igualmente, el genio también lo tenía del mismo tamaño que sus sudodichos genitales.
Sería por esos huevos -o por ese genio- que siempre discutía con él en cualquier instante.
He de reconocer que el tamaño de mis huevos también es considerable -en cuanto al genio se refiere, claro! jajaj!-. Y con tanto huevo, pues montábamos de vez en cuando unas buenas tortillas -O sea, buenas discusiones-.
El caso es que el elemento de Paquito se enomoró platónicamente de uno de mis amigos. Pero, claro, era un amor nada erótico-sexual. O al menos, eso parecía.
Yo no sé si Paquito y David llegaron a consumar sus encuentros amistosos. Pero yo, que vivía por cuestiones de apellido -listas del internado-, en la habitación de al lado, sospechaba que allí había más que sonrisas, tocamientos amistosos y regalitos varios. Tantas visitas de David a la habitación contigua era un misterio muy bien logrado. Y siempre me quedó la sospecha de lo que había detrás de aquellos "amistosos" encuentros.
Y he aquí que un día yo dije a Paquito:
-Pues sí, Paquito. Todos somos conscientes de la belleza ajena.
-Pues lo dirás por tí. Porque yo no soy capaz de saber si un tío es guapo o no -me dijo Paquito-
-O sea, que me estás diciendo que tú ves al "Po zí" y te resulta igualito que Tony Cantó. Ves al Fary y no lo distingues de Antonio Banderas; para tí, todos los hombres son igual de feos o igual de guapos.
-Pues eso lo sabrán los gays. Yo, como no soy gay, no se distinguir si un hombre es más guapo que otro, no sé quién puede ser más guapo o más feo que yo -me contestaba Paquito-
-¡Ya! ¿Y tú piensas que yo me creo eso?. Entonces, para tí David debe de ser tan guapo como yo.
¡Pobre Paquito!... Amarillo se quedó.
NOTA: ¿Alguien pude dudar de la belleza de estos impresionantes tios de las fotos?
Pues eso! Stulti (http://nosinmicamara.blogspot.com/)! Estas fotos con escaleras van dedicadas a tí... que ¡tú sí que sabes! jajaj!!!

martes, 21 de octubre de 2008

Tajo-Segura














No me han gustado nada las declaraciones del Presidente Barreda (Junta de Comunidades de Castilla La Mancha) en las Cortes Españolas.
Y no me han gustado por dos razones. Una Personal y Otra Política.
Empezando por la más aburrida, o sea, por la política, he de decir que no puedo comprender cómo en esta España se puede defender una cosa y su contraria al mismo tiempo y por el mismo partido. Cómo se puede defender en Castilla La Mancha que el Trasvase Tajo-Segura tiene los días contados y defender en Murcia que el mismo Trasvase se mantendrá eternamente para el bien de los murcianos.
Cómo puede defender el PSOE en Castilla La Mancha la caducidad del trasvase -o sea, ni gota para los valencianos y murcianos- y defender el mismo Partido en Murcia que el trasvase nunca tendrá fin.
Cómo puede defender la patriótica Cospedal -PP- en Castilla La Mancha que hay que poner fin a la solidaridad del trasvase -ni gota para los murcianos- y en Valencia y Murcia decirles que no les faltará el agua del Júcar.
Una de dos: o todos nuestros políticos son más falsos que Judas, o nos consideran idiotas a todos los que residimos en este País. Es increible que se haga política de esta forma tan grosera y poco solidaria. Yo, Castellano-Manchego, he mantenido, mantengo y mantendré que hay que ser solidario con el tema del agua. Porque el agua es de todos, y a todos hay que repartirla. No puedo entender estas luchas tan absurdas. Y no puedo comprender esta filosofía tan "cortita" de nuestros políticos regionales.
Y, no me gustaron las declaraciones de Barreda porque suponen un ataque a mi descubrimiento sexual. Porque, pasando el trasvase relativamente cerca de la que fue mi localidad, en el trasvase descubría yo que Luis estaba muy, muy bueno pasando a ser mi fantasía sexual de tierna infancia. Algo no cuadraba. Y lo que no cuadraba era que me gustaban las piernas de Luis. ¡Qué piernas! ¡qué trasero! ¡qué pollón!... Sí!... Nos solíamos dar un baño -imprudentes de nosotros- en aquel trasvase cuando las Cortes Generales autorizaban el traslado de las aguas desde el Júcar al Segura. Para mí, aquel Decreto era un sinónimo de ver desnudo a Luis... y claro! ¡me pasaba todo el año esperando a que los leones de las cortes permitieran que viera de nuevo sus lindas pelotas!... ¡ay!... Cuando había Decreto, yo sabía que vería a Luis desnudo tal y como vino al mundo... porque, rápidamente, organizábamos una excursión para bañarnos en aquellas aguas... y cuando se desnudaba yo lo observaba con mis más pasionales deseos... Cada año estaba más rico y esas piernas se transformaban en robustos muslos. Todo crecía en Luis con aquellos Decretos... Y uno de aquellos años, descubría la enorme mata de pelo que adornaba la intimidad de su fisonomía. Desde entonces, para mí los Decretos del Trasvase eran como una película porno: Luis, con el nuevo año, estaría cada vez más impresionante y el agua que era riqueza para Murcia, era también una riqueza sexual para mí.
Por eso, me han parecido impresentables las declaraciones del Sr. Barreda. Porque, quiere quitar el agua a los murcianos y porque me quiere quitar a mí todos esos recuerdos.

¡Sr. Barreda! ¡Cómo se nota que usted no vió en pelotas a mi amigo Luis!!!

lunes, 20 de octubre de 2008

JULIVS CELTIBER



Me encantaba asomarme por estas ventanas. Estaba prohibido: el estado de los balcones era peligroso para salir de forma tan despreocupada. Pero yo las abría cuando tenía ocasión. Y me encantaba ver esos grutescos tan fantásticos. La Cruz de Santiago adornaba todos los paneles -símbolo de todo el edificio- y a su alrededor todo eran símbolos militares, guirnaldas de flores, armas, condecoraciones, pequeños sonrientes putis, monstruos medievales, serpientes venenosas, flores y pelícanos, pájaros orientales y místicos renaciendo entre plantas misteriosas... era un plateresco magnífico.
Me apasionaba admirar esos relieves que se conservaban intactos después de tantos siglos, pensar en las manos que los tallaron. Todavía se veían en ellos los rastros de un estupendo pulido y las huellas de un cincel finísimo. Las bocas abiertas enseñaban dientes perfectos; las manos, uñas increibles; los cabellos, renacentistas peinados magníficamente labrados. Era un placer para mí palpar con mis manos aquellos maravillosos miradores llenos de conchas perfectamente esculpidas, rozarlas suavemente con los dedos... y mirar el impresionante paisaje decadente de aquellos otoños en que los chopos ardían entre colores amarillos y rojos intensos... Me resultaba impresionante esos otoños tan increiblemente bellos.
Hoy, mirando desde abajo he descubierto un nuevo tesoro en esos muros. Cuando construyeron el Monasterio, de forma casual y en el trazado de un camino para el traslado del material, dieron con la perdida ciudad romana de Segóbriga. Ahí estaba enterrada y sabiamente escondida por el tiempo. Pero, ¿cómo no re-utilizar todo aquellos olvidados sillares de la mejor piedra romana caliza para elevar el nuevo edificio de la Orden de Santiago?. Así lo hicieron... Por eso, hoy encontramos en sus muros inscripciones misteriosas, como ésta que ilustra el presente panel y que hace referencia a un tal JULIVS CELTIBER -sólo hay que aumentar la 3ª foto para verlo-. ¿Una lápida funeraria? ¿una estela dedicada a un dios? ¿un recuerdo por una donación?... no sé! Pero cuando en el siglo XVI encontraron esta bellísima piedra en la Ciudad Romana de Segóbriga, no dudaron en trasladarla e insertarla en la bella fachada plateresca de ese edificio.
Hoy sigue allí custodiada entre las dos ventanas del refectorio. Fue un placer desayunar, comer y cenar junto a JULIVS CERTIBER durante tanto tiempo.

NOTA BENE: Los pueblos celtíberos según Estrabón:De los cuatro pueblos en que están divididos los celtíberos el más poderoso es el de los arévacos, que habitan la región oriental y meridional y son limítrofes de los carpetanos y vecinos de las fuentes del Tajo. La más famosa de sus ciudades es Numancia, cuyo valor se demostró en la guerra de veinte años que sostuvieron los celtíberos contra los romanos; luego de haber destruido varios ejércitos con sus jefes, los numantinos, encerrados tras sus murallas, terminaron por dejarse morir de hambre, a excepción de los pocos que rindieron la plaza. Los lusones, que pueblan la parte oriental, limitan también con el nacimiento del Tajo. De los arévacos son las ciudades de Segeda y Pallantía. Numancia dista unos ochocientos estadios de Cesaraugusta que, como hemos dicho, se alza en la orilla del Ebro. Tanto Segóbrida como Bílbilis son ciudades de los celtíberos... Posidonio dice que Marco Marcelo pudo sacar de la Celtiberia un tributo de seiscientos talentos, de lo que se puede deducir que los celtíberos eran muchos y dueños de abundantes bienes, aunque habitasen en una región tan poco fértil...

domingo, 19 de octubre de 2008

DOMUND

Hoy me he despertado muy bien acompañado. Ha saltado la radio. Y una simpática locutora, en la sección de noticias, ha recordado que hoy se celebra el "Domund". Mientras hablaba, un manotazo se ha estrellado en mi nuca diciéndome: ¡Apaga eso, melón!
El Domingo Mundial era el día en que, siendo un niño, todos salíamos con las famosas huchas recogiendo las monedas perdidas del pueblo para mandarlas a los negritos.
Mientras que yo agitaba las huchas persiguiendo a todas las abuelas que salían de misa, en plena competición con todos mis amigos para ver quién recaudaba más dinero, Aurelia adornaba todos sus abrigos de astracán con pequeñas pegatinas con un anagrama de la festividad.

-¡Niña!... no me pongas más pegatinas que me estropeas el abrigo -decían aquellas octogenarias damas-. ¡Y lo heredé de mi abuela a quien, a su vez, se lo dejó su bisabuela!... Es un astracán muy bueno y con tanta pegatina, me lo vas a estropear. ¡Venga! ¡Venga! ¡que yo ya he echado dos pesatas!... ¡ale!... ¡déjame tranquila!... ¡Ay, por dios! ¡Todos los años lo mismo!... ¡Estos curas no se cansan de pedir...!

Hoy también en la radio, he oido que sólo son necesarios 3.000 millones de euros para erradicar el hambre en el mundo.
Tres mil míseros millones de euros.
Sí... eso es difícil de recaudar por medio de una hucha. Pero no es tan difícil teniendo en cuenta que sólamente el Gobierno Español está inflando 150.000 millones de euros al sector financiero para disimular esta Crisis.
Y tres mil míseros millones de euros no es nada teniendo en cuenta los más de 800.000 millones de euros que la Unión Europea va a enchufar al sector bancario para que tenga liquidez.
Y tres mil míseros millones de euros no es nada comparado con los también 700.000 millones de euros que EEUU insuflará a dicho sector.
Y tres mil míseros millones de euros no valen nada en comparación con sólo una de las vidas humanas que se muere de hambre cada minuto por culpa del primer mundo.

A veces pienso que nos haría falta una infinita crisis... Una crisis de hambre donde no poder insuflar nada en nuestros estómagos para darnos cuenta del padecimiento ajeno. Para vivir en nuestras carnes la muerte de todos esos inocentes niños. Para darle con las huchas del DOMUND en la cabeza a nuestros ínclitos gobernantes.

¡Sólo Tres mil millones de euros!

jueves, 16 de octubre de 2008

AVE MARIA PURISIMA

-Ave María Purísima -dijo la monjita detrás del torno de madera maciza del convento.
-Eeeeeee! Sin Pecado Concebida, hermana. Mire, llamamos ayer por la tarde para decirles que vendríamos hoy a comenzar los trabajos.
-¡Ah! ¡Son ustedes!. ¡Qué alegría!. ¡Miren! ¡Voy a avisar a la madre superiora para que venga ahora mismo y les pueda atender!
De repente un ruido espantoso, martillazos secos, invadieron la portería del convento. Provenían del interior del recinto y resultaban tan desagradables que me dieron ganas de salir a la calle para dejar de oir esos angustiosos zumbidos.
Se hizo el silencio.
-Bueno, hermana. Ya veo que han comenzado las obras dentro del Convento. ¿Venimos en un mal momento?
-¡Oh no! ¡todo lo contrario! ¡todas nosotras les estábamos esperando!. Rogábamos al Señor que pudieran venir cuanto antes. Ya saben: es un trabajo que, precisamente a nosotras, nos hace mucha ilusión. Ya estábamos deseosas de acogerles en nuestra casa. Y claro! Ya hemos avisado al Padre Salvador para que les habiliten sus estancias en el Seminario Menor. ¡Allí podrán descansar tranquilamente, ahora que los muchachos se encuentran de vacaciones!. ¡Ay! ¡Gracias a Dios que ya han llegado! ¡Menos mal que nuestra Santa Madre nos ha escuchado! ¡Cuántas gracias hay que dar al Señor, siempre por medio de nuestra Santa Madre Teresa de Jesús! ¡Cuántas Gracias!... ¡Bueno! ¡como les digo! ¡voy a avisar a la Madre Priora!

¡Zas, Pum, pum, pum.... Plas, Plas, Plas... Pum, Pum, Pum!- Decía de nuevo el ruido horroroso que salía del interior del convento.

Ahí empezó mi experiencia en un Convento de Clausura. Con Permisos y Licencias Eclesiásticas, podíamos -por razón de trabajo- ingresar y movernos libremente por el Convento. ¡Toda una aventura para una persona como yo amante de las antigüedades, de las Obras de Arte y de los artilugios antiquísimos!.
No podré olvidar nunca ese día. Por el lenguaje tan peculiar de una monja de clausura carmelita y por aquellos ruidos espantosos que invadían todo el convento quitándote la Paz de aquella tarde de verano.
-¡Ay! ¡ya están aquí! Soy la madre Superiora. ¡Qué alegría, hermanos! ¡qué alegría! Les estábamos esperando. Tomen la llave y pasen a la Salita de espera. Allí tienen esperando unos zumos de limón con unas pastitas. Esperen, que yo voy para allá y allí, en el locutorio, nos vemos y puedo conocerlos a todos. ¡Qué alegría! ¡cuántas gracias hay que dar a la Santa Madre!
Otra vez el ruido. Horroroso!: Pum, Pum, Pum!!! ¡Plas, Pum, Pum!
-¿Y ese ruido, madre? ¿pasa algo dentro del convento? -pregunté yo, no pudiendo soportar más esos estruendos.
-¡Angelito! ¡no! No pasa nada. ¡Pero qué carita de ángel que tienes! ¡Ay que guapito!. ¡Tú serías un padrecito estupendo! ¿no has pensado nunca en servir a dios en el Sacerdocio? ¡Ay! ¡Con esa cara de angelito que tienes!
-Pues, mire hermana. Cada uno servimos a dios a nuestra manera. No sé... ¡quizás algún día....! -Le dije yo, con las palabras justas y sin saber qué más responder. Pero, hermana, ¿esos ruidos? ¿qué son esos ruidos?
-Nada, hijito! ¡Uy! ¡pero qué gracioso eres y qué buen curita serías!... Nada! ¡no te preocupes, mi niño!... ¡ay! Es que está muy enfermita la hermana Sor María de todas las Angustias Divinas de Nuestro Señor... y claro! Lo que ocurre!... La Madre Antonia, pues, éso!... ¡ya se sabe!... Pero no, hijito, ¡no te preocupes, que no pasa nada!. Ya avisaré yo a La Madre Antonia, mi niño! ¡Ay! ¡Pero qué carita tan dulce tiene mi niño! Si es que pareces un santito!... ¡ay! ¡qué lindo curita serías tú! ¡Y cuántas almas para el Señor procurarías!... ¡Piénsatelo, mi niño! ¡Piénsatelo!....
Nunca podré olvidar, de nuevo, otro nuevo día en aquel Convento. Había pasado ya varias semanas de trabajo en el edificio, semanas durante las cuales, y a diversas horas del día, aquellos ruidos inmundos se reproducían constantemente como un cantar desagradable que invadía cualquier estancia del enorme monasterio.
No pude creerlo. Nunca había visto cosa semajante. Uno de esos días, perdido por el diminuto patio interior pude descubrir el origen de aquellos malditos golpetazos. Se situaban detrás de una antiquísima puerta de ese claustro. Y no pude reprimir mi inquietud por conocer qué es lo que ahí dentro se ocultaba.
Cúal fue mi sorpresa al abrir la puerta y encontrarme con la Hermana Antonia con un enorme martillo de hierro macizo en sus manos. Vestida con todos los hábitos Carmelitanos -fajas, refajos y faldones, tocas y mantones-, con sus mugrientas alpargatas y su hábito remendado, estaba dando fin a un mamotreto, un cajón, una enorme caja... dios! ¡Un ataud!.
Sí... era un Ataud de listones de madera vieja, que mal clavados dejaban tres centímetros de espacio entre listón y listón. Y ensamblado, a modo de cierre, un tablón de madera recortado en forma de ataud que enganchado con unas sogas brutas que servían de agarraderos, permitían el traslado del enorme mamotreto.
-¡Uy! -me dijo la Madre Antonia- ¡angelito!... ¡ya ha descubierto usted el origen de todos sus ruidos! ¡ji-ji-ji-ji! -reía la monja-. ¿Ve como no era para tanto?... ¡A fin de cuentas, a todos nos llegará el momento? ¡ji-ji-ji-ji-ji! -volvía a reir la monja!

No pude creerlo, pero fue cierto. A los dos días y una vez terminado el monstruoso mamotreto fallecía Sor María de todas las Angustias divinas de Nuestro Señor. En su largo lecho de muerte, había estado oyendo -como era habitual en aquel convento- los ruidos que anunciaban la fabricación de su último monumento. Aquel que acojería para siempre su cuerpo mortal.

FOTO: Entrada al Convento de Carmelitas Descalzas de mi localidad: "El Karmen. Año de 1788"

martes, 14 de octubre de 2008

Otra Cena

Ya no puedo soportarlo. No me ha quedado más remedio. Y una vez más me he visto en el compromiso de acudir, a instancias y ruegos de mi primo, a una de esas cenas insoportables que suelen organizar un grupo de amigos de vez en cuando.
Al evento ha acudido un antiguo conocido, que aunque conocido, no es amigo mío. Más bien al contrario: amigo del organizador del evento, no me ha quedado más remedio que soportar sus salidas de tono a lo largo de toda una insoportable cena.
Estaba claro: homófobo por excelencia, este personaje no ha hecho más que deleitarnos, a lo largo de los sucesivos platos, con opiniones fuera de contexto y más antiguas que las porcelanas de mi abuela.
-Pues no!... yo no soportaría tener un hijo gay. Para mí sería una desgracia.
He mirado de reojo y, ante soberana idiotez, he decidido seguir con el lomo y el jamón, pinchando en las croquetas.
No así, mi primo, que tras observar al susodicho personaje, y a pesar de ser hetero y casi un sex-simbol, le ha respondido:
-Pues, ¡hombre!, no es para tanto. El que te la metan puede llegar a ser toda una aventura. Seguro que si pruebas, cambias de opinión.
-¡Como dices eso! Yo no soy maricón!
-¡Pues deberías probarlo! -le respondió el otro-. Tiene su gracia... e incluso, quizás cambiarías de pareja. Un buen negro, quizás!
Yo seguía mirando a mis croquetas, pensando en la indigestión que semejante personaje iba a procurarme... Mejor centrarme en los pinchos, porque el elemento me estaba, con sus comentarios, amargando la cena.
-¡Bueno! -dijo el elemento!... ¡ahora resulta que estoy rodeado de maricones!
-¡Hombre! -dijo mi primo-. Pues que te metan la puntita da un gustito que alucinas. ¡Te lo digo yo!
Ya no pude soportarlo más y decidí rematar la conversación:
-Pues sí! El que te la metan puede llegar a ser divino. El meterla, toda una experiencia. Y una buena polla puede llegar a ser el camino hacia la felicidad en esta vida.
De todas formas, nunca pude comprender cómo se puede ser tan macho y dedicarse a ver películas porno en el video del Colegio Mayor comprobando cómo tus amigos del alma se rascan sus paquetes mientras observan inflarse el paquete del vecino; eso sí, todos juntitos observando las enormes pollas que refleja el televisor. Eso deben de ser costumbres que todos los machos comprendeis muy bien.
-Bueno! Cambiemos de tema, ¡el tiempo esta muy bien! ¿verdad? -Dijo el susodicho personaje, amarillo por sus recuerdos estudiantiles de aquellos años en el Mencionado Colegio Mayor-
Definitivamente, ¡pena de no tener a mano una buena .... para cerrar esas bocas!

lunes, 13 de octubre de 2008

A mi vieja.

Hoy, Mi Vieja -o sea, mi compañera de trabajo- no ha podido soportar que criticara a Rajoy por su salida de tono en relación al desfile nacional del 12 de Octubre. Y, como reacción a mi comentario sobre la nueva hipocresía descubierta a nuestro ínclito líder de la Oposición, me ha dicho que tengo muy, pero que muy mala leche.
-Tú no sabes la leche que yo puedo llegar a tener, le he dicho.
Y en homenaje a Mi Vieja Preferida, de la cual ya tendré ocasión de hablar en mi blog, aquí os dejo una demostración de la Leche que yo le daba, tanto a mi Vieja como a Rajoy. Que, para el caso que nos ocupa, es lo mismo.
Pues eso!

domingo, 12 de octubre de 2008

12 de Octubre

12 de Octubre. Día de la Hispanidad.
Multitud de estelas recuerdan, en España y supongo que en toda Hispanoamérica, tal día y a infinidad de personajes relacionados con él.
A mí siempre me pareció una fecha entrañable. Sin tener en cuenta las grandes polémicas sobre la acción colonizadora de España en América, las grandes críticas de las naciones hermanas a la que fuera su colonizadora y los grandes desastres culturales que una acción así desendecanó en aquellas culturas intactas, no dejo de emocionarme cuando, por cuestiones de trabajo, trato con tantos, tantos, tantísimos hispanoamericanos que viven en nuestras tierras y que como hermanos son tratados e integrados en nuestro País. Cada día, en la calle, en mi barrio, en el autobús, en el cine, en el teatro, en el supermercado son infinidad de Ecuatorianos, Colombianos, Mexicanos, Dominicanos, Argentinos... -y demás nacionales de aquellos países- con los cuales tratamos de forma tan cordial, en una misma lengua, en unos mismos gestos y en unas mismas complicidades, que un día así no hace nada más que recordarme los largos lazos de fraternidad con estas gentes y con estos países con los que España debería de volcarse preferencialmente en su acción polícitica internacional.
Sí... en un día así, echo de menos encender la televisión y encontrarme con un telediario en el que después de las noticias nacionales se hable e informe largamente sobre estos Países hermanos, sobre estas gentes que con su esfuerzo ayudan a caminar a la economía nacional y a tintar de multiculturalidad a este estado tan desgastado por discusiones nacionalistas tan vanas. Echo de menos una política nacional volcada de forma preferencial en los paises de habla hispana y aunque conozco a muchos españoles que -en misión- dejan su vida ayudando en la pobreza a estos hermanos hispanoamericanos en sus propios países -enseñanza, sanidad, infraestructuras, educación y formación profesional...-, echo de menos una acción social internacional para sacar de la pobreza a todos estos territorios bellísimos que un día formaron y constituyeron "Las Españas".
En un día tal, quede, a pesar de todo, un saludo de hermandad.

jueves, 9 de octubre de 2008

¡Pobre D. ALFONSO!
















Hoy me he encontrado con D. Alfonso XIII. ¡Pobre Alfonso!
Me ha asombrado encontrar su nombre tallado -y con buena letra- en esta preciosa fuente. Dedicada por lo que, en aquel momento y por muy poco tiempo, fuera el Ayuntamiento Constitucional de la Villa, D. Alfonso todavía pervive en la memoria de estas limpísimas aguas.
De origen romano por su manantial, mis adoradas aguas vierten su poético rumor en una preciosa fuente re-dedicada a D. Alfonso... ¡pobre Alfonso!.
Dicen los paisanos que si -en un momento de desesperación- bebes del bronce central, tus deseos se verán un día recompensados... y, seguro, tu cuerpo se verá acariciado por las más dulces de las compañías. Doy fe que es cierto. Cuando bebí de aquellas aguas, nunca pensé encontrar caricias tan dulces como las que a mi cuerpo ha reservado el tiempo. No así D. Alfonso. ¡Pobre D. Alfonso!.
D. Alfonso, el de Roma. Sí... hoy también encontré entre los cajones de mis abuelos el Monárquico recuerdo a la Muerte de D. Alfonso. ¡Pobre D. Alfonso!. Decía el recordatorio que sus últimas palabras fueron: "¡Dios mío, España! ¡España, dios mío!"... ¡Pobre D. Alfonso!. Y contemplando tal reliquia (¿cómo llegaría a manos de mis abuelos este precioso recordatorio?), me he acordado de la fuente de aquellos días. ¡Pobre D. Alfonso!
¿Qué hiciste Alfonso?. Todos te abandonaron en aquellos momentos. Apostaste por Rivera, y cuando Rivera cayó, contigo cayó la Paz disimulada que tu presencia traía a España. ¡Pobre D. Alfonso!
A pesar de todo y por ese mismo todo, un Rey tuvo que abandonar su corona. Tras el ruido de aquel tren, vino una ilusionante República. ¡Pobre D. Alfonso!
Y ahí quedó, en estas aguas, en esta fuente y en esta Villa el rumor de tu presencia diminuta.
¡Pobre D. Alfonso!

Alfonso XIII nació el 17 de mayo de 1886 en el Palacio Real de Madrid. Como hijo póstumo de Alfonso XII y María Cristina de Habsburgo-Lorena, su reinado empezó desde su nacimiento; por ello, su madre ejerció como regente hasta 1902. En 1906 se casó con Victoria Eugenia Julia Ena de Battenberg, con la que tuvo seis hijos: Alfonso, Jaime, Beatriz, Cristina, Juan, al que nombró sucesor de los derechos dinásticos, y Gonzalo.
Desde joven, Alfonso fue educado en la doctrina católica y liberal para ser rey y soldado. En el contexto del alejamiento entre la España oficial y la España real, los intentos de regenerar España tras el desastre de 1898 y la constitución de 1876, el Rey intervenía en asuntos políticos. Además, tuvo que afrontar diversos problemas como las guerras de Marruecos, el movimiento obrero y el nacionalismo vasco y catalán.
El inicio del reinado coincidió con un cambio generacional en los los partidos dinásticos: el conservador Cánovas fue sustituido por Antonio Maura y el liberal Sagasta por José Canalejas.
La neutralidad de España durante la I Guerra Mundial abrió mercados y favoreció el crecimiento económico y la agitación social. La crisis de 1917 junto al nacionalismo catalán, el sindicalismo militar y las huelgas revolucionarias aumentó la descomposición del régimen político que influyó en el fracaso en 1918 de un gobierno nacional formado por miembros de los dos principales partidos. El reajuste económico posterior a la Guerra Mundial, los fracasos militares en Marruecos, las revueltas sociales y los problemas regionales aumentaron las dificultades internas y la debilidad de los gobiernos, que fueron incapaces de afrontar la situación.
El golpe militar de Miguel Primo de Rivera de 1923 fue la solución de fuerza que intentaba solucionar la crisis, con la aprobación del Rey. En un principio, la dictadura fue bien recibida: en 1925 el desembarco de Alhucemas terminó con la guerra de Marruecos; se restableció el orden social y se produjo un desarrollo de las obras públicas. En cambio tras el fracaso de la experiencia primorriverista, el Rey intentó en 1930 restaurar el orden constitucional, pero los partidos republicanos, socialistas y el nacionalismo se unieron contra la monarquía. La victoria electoral de los socialistas y republicanos en las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 hizo que el monarca abandonara el país, en un intento de evitar una lucha civil, momentáneamente evitada con la proclamación de la II República, el 14 de abril de 1931.
Alfonso XIII vivió en el exilio diez años, hasta su muerte en 1941, en Roma, donde vivió sus últimos años de vida. En 1980 sus restos mortales se trasladaron al Panteón de los Reyes del Monasterio de El Escorial (Madrid).

martes, 7 de octubre de 2008

¡ME VEN!

Hoy las he visto de nuevo. Rondaban en mis sueños correteando por todas las estancias de mi casa.

Estaban en todas y en cada una de sus estancias. Ha sido un sueño horrible.

Ayer las vi correr por las estanterías de mi despacho. Eran carne de su carne, hijas de sus madres. Los ratones de sus ratas. Incluso tuvieron la osadía de mirarme en el silencio. Los miré. Correteban por la estancia cuando todo quedó tranquilo. Se escondieron.

Yo sé que estais ahí. A pesar de las luchas del personal de mantenimiento.

Me observais todas las tardes escondidos entre los papeles. Y ni siquiera D. Gutierre pudo acabar con vosotros.

Creo que conocen mi domicilio. Me espían cuando me voy. Me siguen en las estrechas callejuelas de mi ciudad. Y entre los muros de la Iglesia de San Juan, relamiendo los huesos de D. Gonzalo, me ven meterme en la moderna escalera de mi casa. Están cerca. En los pasadizos secretos que en la Guerra Civil manos especialidadas hurdieron en la profundidas de esa bella plaza... y que desembocan en las profundidades de mis estancias.

Y, esta noche, en mis sueños... las he visto junto a mi cama... Ratas inmundas, deseando robarme toda la Paz de mis noches.

Hoy... se han empeñado en romperme la serenidad de mis sueños... Definitivamente, ¡me la han robado!

domingo, 5 de octubre de 2008

RUEGEN A DIOS POR ELLOS. 1679














No es habitual encontrarte con estelas en los edificios públicos y en los Grandes Monumentos que reconozcan y homenajeen a la gente humilde y sencilla, a los trabajadores que padecieron los sufrimientos de tener que levantar estas grandes moles.
Por esto, esta estela del Monasterio de Uclés -otra vez- me ha llamado la atención. Acostumbrados a las grandes y rocambolescas letras endiosadoras de personajes nobles, estas conchas rinden sencillo recuerdo a aquellos trabajadores que perdieron su vida en un accidente laboral mientras levantaban la gigantesca fachada de poniente.
Corría el año 1679 y los Maestres y Priores de la Orden de Santiago deseaban finalizar el gran edificio que sería cabeza de la Orden y donde se centralizaría administrativamente la institución. Allí estarían los Archivos Generales, la gran Biblioteca que contendría Privilegios y Donaciones reales. Allí gobernaría el Gran Maestre un inmenso territorio desde el que podría ir a caballo hasta el mismísimo Portugal. Allí, "Los Trece" Caballeros elegirían a quien gobernaría la Orden tras el fallecimiento del Maestre y allí tendrían los Frailes -hombres de espada y de oración- su casa principal desde la cual arrancar al moro todos y cada uno de los territorios hispánicos.
Sólo restaba -para finalizar la moderna obra que habría de transformar el antiguo castillo árabe- la construcción de esa fachada. Y fue entonces cuando los andamios fallaron una vez que se estaban abriendo los cimientos. Cinco personas fallecían y el Prior D. Diego Pérez Alcázar ordenaba rendir recuerdo a su memoria mediante esta piedra tallada.
Era un Once de noviembre de 1679 y aunque dicha fachada fue proyectada por el arquitecto Francisco de Mora -discípulo de Juan de Herrera-, fueron muchos los arquitectos que en ella intervinieron: Francisco Mijares, Diego de Alcántara, Juan de Valencia y Bartolomé Ruiz.
Cada vez que paso por allí, y después de tantos siglos, me vienen a la memoria estas pobres cinco personas: ¿Qué sería de sus familias? ¿Qué pasaría con sus hijos, con sus esposas?...
Triste que en las grandes obras siempre existan grandes desgracias.

jueves, 2 de octubre de 2008

GONZALO CHACON

Hoy he paseado por sus muros. Es uno de los rincones más nobiliarios y novelescos de todo mi barrio. Y ahí estaba petrificada la eterna oración de Los Chacones.

Justamente detrás de esta popular oración se encuentran sepultados los restos de D. Gonzalo Chacón y de su esposa. En una sencilla capilla gótica cuya entrada está protegida por una espléndida reja de la época (Siglo XVI), reposan los restos de este matrimonio castellano tan influyente en la España del Siglo XV. Retratados sus cuerpos exentos en un brillante alabastro, D. Gonzalo luce su armadura y su esposa su elegante vestimenta. Sonríen. Duermen. Es una sonrisa eterna, de ésas que uno recuerda hasta después de muertos los sonrientes.

Cuatro leones protegían el túmulo funerario. Sólo quedan dos. Todo él está rodeado por unas estupendas letras góticas que, vanamente, me he esforzado por descifrar. Imposible. Supongo que serán unas vidas tan intensas que son complicadas de comprender con la escueta lectura de las letras de sus sepulturas.

Olvidado, D. Gonzalo. Olvidados sus huesos, su vestimenta y su sepulcro. Pero un cartel exterior eleva una eterna oración. La Oración de D. Gonzalo Chacón.

Gonzalo Chacón (1429 - 1507) fue un político e historiador español. Durante el reinado de Juan II de Castilla, estuvo a las órdenes del valido Alvaro de Luna, y durante el de Enrique IV de Castilla fue contador de la princesa Isabel, luego Isabel la Católica. Se le atribuye por A. D. Deyermond la "Crónica de don Alvaro de Luna" (1453) que otros atribuyen a Álvar García de Santa María.