domingo, 2 de mayo de 2010

TC



Lo del Tribunal Constitucional, en este País, no tiene nombre.

Dicen que el cuando el Colegio cardenaliceo no conseguía ponerse de acuerdo para el nombramiento de un nuevo Papa, la solución del derecho canónico era clara: Se encerraba a los cardenales sin agua ni comida en el recinto donde habría de tomarse la decisión y se quitaban las tejas y techo del edificio para forzar una decisión obligatoria. Y, cuando empezaba a llover o a caer el frío nocturno y los cuerpos no tenían con qué alimentarse, el nombramiento del Nuevo Papa era inminente.

Lo que está ocurriendo en este País con el Tribunal Constitucional es surrealista en todos los sentidos. No sólamente por el carácter político de la institución -que nadie quiere reformar-, no sólo porque sus magistrados ya se encuentran prescritos sino por su incapacidada para ponerse de acuerdo sobre la constitucinalidad de una Ley.

El que unos abuelos que cobran aproximadamente 2o millones de pesetas al año muestren tal nivel de incapacidad me parece vergonzoso. Y que se permita que tales abuelos estén prorrogados en sus funciones con este expediente, más impresentable todavía.

Este País está llegando a niveles de incapacidad económica, política e institucional inmensos. Y lo peor es que, el común de los mortales no se escandaliza al ver tanta incompetencia y tanta desvergüenza.

Yo sugiero que en vez de quitarles las tejas, les quiten el sueldo. Porque tiene huevos que unos vejestorios que deberían estar en Benidorm disfrutando su jubilación tengan al País en vilo con tanta incapacidad y sectarismo.

Realmente, todo esto es una inquisición institucional.

6 comentarios:

Stultifer dijo...

Buenos sueldos, mejores sillones, mucho poder. ¿Quién va a querer dejar esta situación? Yo haría lo mismo.

Pimpf dijo...

Chuchi, qué síntesis de crítica hacia el TC, pues que quieres que te diga, es normal que estén así y que no saquen adelante su sentencia sobre el estatut, y que unos presionen para que si la saquen y los otros para que no, pq sea lo que sea será un fregao. Y más, si su renovación depende de quienes depende.... pues en esas estamos.

Bicos ricos

Thiago dijo...

Por una vez estamos de acuerdo... y eso me preocupa. Es escandaloso que estos señores se fumen un puro con nuestra legislación y luego pidan "respeto". Cuatro años para determinar si una ley es constitucional es escandaloso. Son unos mangantes, y solo obedecen a consignas partidistas.

Otra cosa es buscar el origen del asunto. El PP está jugando con fuego, no quiere perder la mayoría que logró cuando el gobernaba y pretende burlar la ley, quiere seguir mangoneando el país vía poder judicial, y ha jugado sucio con la renovación proponiendo a dos personas inadmisibles, sin atender a la diversidad de las comunidades, solo por joder al psoe. Espero que el partido zapaterista luego le devuelva la pelota y no será tan tonto de atenerse a la renovación cuando gobierne el PP de nuevo, que ocho años para renovar un Tribunal de acuerdo con la mayoría politica ya está bien, no?.


Bezos.

Thiago dijo...

Cari, tienes un premio en mi blog. Es uno de esos horrorosos que rulan de blog en blog, lo siento, pero ahora cargas con él, sino no hubieras escrito post tan buenos, ajaja

Bezos.

Anónimo dijo...

Pues si que es un cachondeo, pero esto lo hace el partido del gobierno, que es el que nos ha metido en el fregao del estatuto para conseguir votos y votos y votos.. les da igual todo.

Quien se saltó las reglas del juego fue el partido socialista renovando a la "socialista" presidente del Tribunal Constitucional, pero luego le salió mal la jugada, y estamos en la que estamos...

La pena, es que sean los políticos los que están mamoneando la Justicia.

Un beso cielo

BRILLI-BRILLI dijo...

Amorr....te doy toda la razón..pero hay que ser tonto para creer en la justicia,no me indigno porque nunca he creido en "tan" superiores tribunales.

Besos